21 nov 2011

Breve recordatorio para mí.

De vez en cuando haz caso del vago, no siempre se equivoca. Deja a un lado la pasión sin freno y no siempre obedezcas al impulso. No está mal sentir, no está mal disfrutar, pero piensa, por favor piensa, sé que a veces es difícil. Estás a tiempo, aclara cualquier duda, pero no te emociones amigo. No todos piensan igual que tú.

16 nov 2011

¡A huevo!

Te recomiendo escuchar mientras lees: (No se porqué presiento que esta canción es la indicada para la entrada)



¿Qué tan loco debe ser un loco para notar que lo es?

Se sabe que no soy la persona más cuerda del planeta, y con loco no quiero decir que soy un "Bola de boliche" cualquiera. Siempre se confunde al loco con el distraido y a su vez éste último pasa por tonto, y aún que a veces funcione hacerse el tonto, no quiere decir que lo sea do nacimento.
Las cosas funcionan bien desde que acudí a la terapia.(¿Confirmada mi locura?) Esa seguridad que comenzó como un juego, y ya es parte escencial de mí.
La reestructuración de mi yo (formada "ingeniosamente" en un diagrama de Venn) funciona de maravilla, ese cambio de universo y separación indicada de conjuntos, que a su vez, están unidos, pero que funcionan de maravilla por separado. Es decir, existe equilibrio en las múltiples facetas que forman mi ser.
Entre las vueltas que ha dado la vida y mi inesperado ingreso a la Metropolitana (del cual se ha hablado muy poco en este espacio) el miedo ha ido desapareciendo. Las cosas están encajando perfectamente y los factores inesperados (de los cuales por su puesto no tengo el control) han dejado de ser negativos en muchos aspectos.
Compartir lo que pienso no es tan difícil cuando no se espera la aprobación de alguien más. Es más, abrirme y decir lo que siento (que no siempre coincide con lo que pienso), ya no es tarea imposible. Y así como siempre ha sido fácil decir que me cagas, es decir que me gustas.

Antes me preguntaría, ¿Qué pasará mañana? ¿Porqué tengo que esperar? ¿Acaso estarás mintiendo y esto sigue siendo parte del macabro complot que dios (sí, con minúscula) ha creado ingeniosamente con ayuda del mundo contra mí?

Que importa lo que pase mañana, la paciencia se ha convertido en mi aliada, y aunque varios impulsos invaden mi mente, ya llegará nuestro momento.
Y si no llega pues bien, esta vez no me he quedado con las ganas de decir lo que pienso y estoy satisfecho con el primer prerresultado.

Claro que no me gustaría llegar al 2012 sin algún avance más, quizá eso de la impaciencia es buena cuando se trata de evitar cobras venenosas. Pero entre las cosas buenas que se aprenden con los años (sin caer en el pensamiento emo de "la vida me ha pateado mucho"); está el respeto; y otra de las premisas que forman parte de mi nueva dieta:
"No hagas lo que no quieras que te hagan".
Me gusta la seguridad en la gente, tampoco me atemoriza una persona decidida que sonriente y feliz de la vida te dice "Ya lo decidí. Tú y yo seremos novios" ¡Porque sí lo dijiste! ¿No? A veces confundo mis pensamientos con la realidad. Y no por estar esquizofrénico. Es más fácil combinar el mundo de la realidad con el de la fantasía y ver las cosas como solo yo las puedo ver. Claro que muero por experimentar esas cosas que hasta hoy son solo un mito despierto y una realidad en sueños. Me declaro fanático del misterio que esta aventura representa, cosa contraria al ayer.

Ahora que todo marcha viento en popa conmigo, no te has vuelto una necesidad (A veces me dirijo a tí, solo a tí, descuidando un poco al lector) y eso me agrada, encuentro en tí un buen complemento y coincido con tu desición, previamente anunciada. ¡Nomás no te me vayas a rajar!

Estar de este lado de mi mundo está poca madre, no recuerdo hace cuanto no visitaba la cima. Y antes de quedarme embobado mirando fascinado todas estas maravillas, me regreso a la línea de tierra, caminando en línea recta, sin dejar alguna parte de mi sin visitar. Disfruto mi soledad, tambien de la compañía, disfruto mi vida, mi cuerpo y las circunstancias que me acontecen tal cuales son. -¿Qué más podría pedirle a la vida? - Nada, tampoco espero algo de la vida.
Espero nada de nadie y ofrezco todo lo que soy. (Que ofrecer no es lo mismo que entregar).

¿Porqué no esperas nada de nadie?, podría preguntarse algún despistado lector o desconocido.
¿Para que esperar? Cuando esperas, siempre esperas más y como nadie cumple tus espectativas terminas desilusionado. En cambio (Me caga que digan "Más sin en cambio") cuando no esperas, cuando realmente solo te dejas llevar, cualquier cosa que suceda en el entorno, será bienvenida con sorpresa y alegría.

Claro que me muero por saber que hay más allá de lo que tengo, la ambición es parte del ser humano. De una cosa estoy seguro. ¡No te me vas a escapar! Al menos no tan fácil como puede dejarse ir a la gente.

Tu me volverás más loco, incluso ahora mismo lo haces, no es reproche, no es reclamo, gusto de mi locura, gusto de la tuya y gusto que no te moleste la mía, que no te desagrade, pues gusto de tí, gusto el café y gusto un buen cigarro.

A que clase de mal entendidos puede llegar esto...
¡Que me importa! Mientras me entienda y entiendas que más da.

Quiérome, Ámome, gusto de mí y ahora que se lo mucho que valgo, no será fácil caer de nuevo.

Demasiado optimista, ¿no?
Pues claro que sí. ¡A huevo!

7 nov 2011

El estudiante.

Te recomiendo escuchar mientras lees:


Caminaba con calma regreso a su casa, recordando con esa estúpida sonrisa infantil sus palabras. Una a una se repetían en la atarantada mente del estudiante haciéndole perder la cordura y sorprendiendole a cada momento.
Perdido en sus pensamientos jamás notó que la tarde llegaba a su fin y que aún faltaba mucho para llegar a casa.
¡Qué importa! Realmente que tanto le puede importar si sigue absorto en el mundo de ensueños pensando.
El viento jugando con las hojas de otoño que golpean el cabello del estudiante al tiempo que crujen bajo sus pasos, hace de las suyas esparciendo por cortos instantes el aroma de su perfume que quedó impregnado en su playera.
Él no lo nota, pero en cada bocanada de aire, crece su sonrisa.
No cabe de incredulidad, sorpresa y regocijo, de todas las posibles charlas creadas en su mente, jamás consideró aquella siquiera como una opción.
Un beso en la mejilla, un abrazo tierno y sincero, ¿Qué más puede pedir un estudiante?
El tiempo es lo de menos cuando siente la alegría y la juventud.
El estudiante solo vive su presente, vagos recuerdos del ayer vienen a su mente, pero el viento no lo deja volver atrás, lo empuja con fuerza hacia adelante, mira con la inspiración que se creía perdida el porvenir, nuevas experiencias y aprendizajes vienen en camino, no lleva prisa en su paso.
Sin notarlo su hogar quedó atrás hace mucho, y no tiene intensión de volver aún, sigue caminando ensoñado, feliz de reencontrarse consigo mismo.
Sonríe una y otra vez encantado de la vida, encantado del propio amor.
"Ya vendrá nuestro día, que tanto puede faltar" tararea ligeramente, esa melodía que sin mucho contenido lírico pero bastante sentimiento acaba de inventar.
Se aproxima el amanecer, es hora de regresar y vivir otro día de estudiante. Soñando, pensando y disfrutando las frías mañanas de otoño, contemplando al mundo; rodeando sin cesar (como la vida del estudiante); al siempre brillante sol.